jueves, 20 de octubre de 2011

Transversal

Paniagua Arguedas, Laura ... [et al.]. "Pobreza Urbana en América Latina y el Caribe" : CLACSO, 2011.


Si para las ciencias sociales resulta una tarea ardua definir qué es la pobreza, esa empresa se torna aun más compleja cuando le agregamos el adjetivo urbana. ¿Por qué hablar de pobreza urbana? ¿Cuál es la especificidad que la vida en la ciudad le confiere al ya complejo fenómeno de la pobreza? No podemos desconocer que las ciudades son territorios históricamente privilegiados para el análisis de la pobreza en tanto condensan, incluso visualmente, por sus concreciones en el paisaje urbano, tres lógicas o sentidos: la de la acumulación del capital, la de la acumulación del poder político y la de la reproducción de la vida humana (Coraggio, 1997:37). Estas lógicas de reproducción de la ciudad modelan el sistema de diferencias en la disposición espacial de las actividades urbanas.
Este sistema de diferencias se estructura en torno a cuestiones que son propias de la vida en la ciudad1 y que contribuyen en la definición de la especificidad de la pobreza urbana: riesgos ambientales y de salud; vulnerabilidad resultante de la mercantilización; fragmentación social y delincuencia; contactos negativos con el Estado y la policía, así como las relaciones de proletarización (Amis, 1995; Wratten, 1995)2.